Hormigón impermeable con tecnología cristalina

Los impermeabilizantes clásicos son barreras físicas que cierran el paso del agua, y con el paso del tiempo pueden fallar por rotura o en los puntos de discontinuidad. Krystaline desarrolla un compuesto industrial químico con tecnología cristalina hidrofílica que confiere propiedades impermeables al hormigón, convirtiendo su estructura en estanca para múltiples aplicaciones, tanto en obras de nueva construcción como para la reparación de elementos ya afectados por el agua. La solución perdura en el tiempo y el hormigón no pierde la estanqueidad durante su vida útil.

Formación de cristales en la red capilar del hormigón

La tecnología Krystaline actúa como un catalizador creando una reacción química entre las partículas no hidratadas del cemento y el agua del hormigón. Esta reacción química potencia la creación natural de cristales de silicato de calcio hidratado, que en el plazo de tiempo de unas semanas aumentan progresivamente de tamaño y bloquean la red capilar del hormigón, impidiendo la entrada del agua. 

La tecnología cristalina Krystaline necesita 2 ó 3 semanas, según el tipo de hormigón y los factores medio ambientales, para la activación y crecimiento de los cristales en la red capilar del hormigón. El hormigón impermeabilizado con la tecnología Krystaline generará automáticamente nuevos cristales pero siempre en presencia de agua, por lo que es necesario curar los elementos tratados mediante el rocío de agua pulverizada.

La introducción de la tecnología cristalina dentro del hormigón se realiza en forma de aditivo para nuevas estructuras o como producto de reparación , y se aplica como una lechada en superficie, como aditivo o en forma de espolvoreo.

Una alternativa a las láminas impermeabilizantes convencionales