Mapa de recursos:
El proyecto arranca desde la pequeña escala del material, con la premisa de utilizar el mínimo de recursos importados posibles y así conseguir dos objetivos, por una parte reducir la huella ecológica reduciendo el “mapa de recursos” y por otra ubicar la construcción en un contexto mucho más amplio que el físico; el económico y el cultural. De esta forma, los pocos elementos que están disponibles en la isla y que no dependen de importaciones son los producidos por el sector de los prefabricados de hormigón. Desde la implantación del bloque de hormigón como elemento base de la construcción en Mallorca, se ha creado una floreciente industria de pequeños fabricantes que utilizando áridos locales manufacturan una gran abanico de pequeñas piezas tan características de las zonas residenciales desarrollistas de la década de los ‘70, como el barrio en el que se ha construido el centro. Es pues, un ejercicio que explora las capacidades plásticas a la vez que “pone en valor” los elementos comunes utilizados en la arquitectura verdaderamente popular y que no gozan del ”estatus” de otros materiales. La fachada se ha realizado con “bloques alemanes” de la empresa Palerm, y en su manufactura sólo se han utilizado áridos de una gravera a menos de 5Km . Ésta quiere ser un test 1:1 de las posibilidades intrínsecas de los pequeños prefabricados de hormigón disponibles en la isla. Se han realizado pruebas de carga para determinar la resistencia mecánica de los bloques que no se han utilizado en su posición habitual cuando el módulo resistente se sobrepasaba la colocación vuelve a su posición habitual que puede recibir cargas hasta 5 veces superiores. La fachada autoportante se ha planteado como una mezcla entre una fachada ventilada y “cavity wall” mejorando la eficiencia térmica del conjunto. Para su ejecución se ha anclado y grapado la hoja exterior del cerramiento a los forjados consiguiendo eliminar los puentes térmicos.
Actuación directa:
La ampliación del IES Josep Sureda i Blanes como módulo de Ciclo Formativo de Industria Alimentaria se plantea de una forma directa y literal, como continuación del instituto existente, sin necesidad de separarse o alejarse para no ser absorto por el gran volumen del instituto. Se plantea un acceso compartido con el centro, utilizando el mayor número de elementos arquitectónicos y técnicos de la construcción existente como la escalera, el ascensor y el sistema de calefacción.Las luces de los nuevos forjados se han resulto con placas prefabricadas para dar continuidad estructural y dotar al centro de un espacio flexible con posibilidades de redistribución e incluso ampliación.
Interacción social:
La intervención en la zona de Son Gotleu, es una oportunidad para actuar sobre un barrio con graves problemas raciales y de integración social. Un barrio que regularmente es noticia debido a las tensiones raciales latentes y que está lejos de una resolución amistosa. Entendiendo el entorno y su dimensión sociocultural, nuestra intervención quiere “aportar espacios de interacción”, zonas que puedan favorecer pequeños vínculos entre los usuarios actuando como precipitadores sociales. La gran parte del solar afectado por el crecimiento de la autopista y que está exento de construcción se utiliza para el uso de una práctica universal en todas la culturas: la producción de alimentos. De esta forma, el centro se convierta en un catalizador dónde se cierra el círculo empezando por la integración social la producción de alimentos y su transformación.
Autoría: Feina Studio - Alberto Sánchez / Aina Salvà / Antonio Marqués
Localización: Palma, Islas Baleares, España
Año: 2007- 2010
Fotografías: José Hevia
Editado por:
Publicado: Dec 11, 2013