El diseño del edificio parte del carácter pedagógico y a la labor formativa y de concienciación que la Fundación Laboral desarrolla en labores de Construcción y Prácticas Preventivas en el trabajo. El objetivo era obtener un centro que transmitiese con su pedagogía constructiva y funcional el espíritu de la propia Fundación que lo regenta. Es por ello que las medidas adoptadas en su distribución, elección de materiales y confort ambiental fueron encaminadas en gran medida hacia una austeridad y funcionalidad que reflejaran la vocación de servicio al sector, así como una respuesta clara a favor de un futuro y edificio sostenible.
La nueva sede se sitúa en una parcela sensiblemente plana del polígono industrial de San Miguel en Villanueva de Gállego (Zaragoza). Debido a las generosas dimensiones de parcela de las que se dispone (19.000 m2), y a pesar de los amplios requerimientos espaciales para la docencia práctica en trabajos exteriores, se optó por un edificio cuyo programa se desarrollara en una sola planta, facilitando el acceso y circulación de todos los usuarios. Suponía además otras ventajas respecto al bloque en altura, como la sencillez de planteamiento y mayor relación de todos los espacios que componen este centro; la economía estructural y de medios constructivos: la rapidez de ejecución o la perfecta solución a todos los temas de evacuación de incendios y supresión total de barreras arquitectónicas.
La propuesta está basada en la sencillez de los planteamientos organizativos y de composición. Se desechan las formas complejas en favor de la claridad en la configuración volumétrica, capaz de reafirmar la presencia del edificio de un modo contundente en medio de un polígono industrial de escaso interés arquitectónico y mezcla de actividades de muy distinta índole.
La adecuada distribución de las zonas que presentan usos dispares, de manera que se encuentren correctamente comunicadas entre sí, fue uno de los grandes retos del proyecto. Para garantizar una separación efectiva y eficaz entre ellas, sin interferencias (tránsito de personas ajenas. ruidos, suciedad. etc.).se dispusieron una serie de patios que, además, aportan riqueza espacial y procuran la iluminación natural de las distintas dependencias (aulas, distribuidores...).
En el interior del edificio, todas las dependencias siguen los criterios de máxima austeridad, sin concesiones banales, acentuando las cualidades espaciales de las distintas estancias, confiando en la potencia de la luz, la volumetría, la sinceridad constructiva y la textura de los materiales. Se utilizan materiales propios de la arquitectura industrial y la prefabricación (paneles de hormigón, chapa metálica..) , de escaso mantenimiento y comportamiento óptimo. Se apuesta, igualmente, por la sencillez y sistematicidad en la resolución de acabados y detalles interiores, predominando el color blanco en paredes como en elementos de carpintería interior, la elección de un único tipo de suelo (hormigón con tratamiento de pinturas de poliuretano en tono gris mate), de forma que su acabado permita responder a las más que notables exigencias de uso de las zonas de talleres, o los techos suspendidos registrables de bandejas de chapa desplegada de acero en los distribuidores.
Autoría: Mrm arquitectos - José Antonio Sacristán Fernández
Localización: Villanueva de Gállego, Zaragoza, España
Fotografías: Mikel Muruzabal / FLCA
Editado por:
Publicado: Sep 26, 2013