Serpentine Pavilion 2019

“Una piedra crea un paisaje, y un paisaje se encuentra usualmente entorno a un edificio. Quería crear este paisaje que existe al exterior, dentro del propio edificio”. Junya Ishigami

©Norbert Tukaj

En 2019 el tradicional Serpentine Pavillion londinense ha sido diseñado por el arquitecto japonés Junya Ishigami. Ishigami, conocido por su arquitectura experimental que interpreta las convenciones de la arquitectura tradicional y refleja los fenómenos naturales.

El proyecto de Ishigami es el resultado de una investigación sobre la cubierta, el elemento arquitectónico más común utilizado en el mundo. La pieza se compone de una gran cubierta de piedra que proyecta grandes vuelos sostenida por una estructura de acero esbelta y de apariencia ligera. Para Ishigami esta concepción arquitectónica es la que le permite articular un “espacio libre”, filosofía en la que el autor busca la armonía entre las construcciones realizadas por el hombre y aquellas que pertenecen a la naturaleza. Así, el pabellón se convierte en un espacio casi-cueva, en palabras de Ishigami:

“mi diseño para el pabellón juega con nuestras perspectivas sobre construcción del territorio, en contraste con la huella de un paisaje natural, enfatizando una sensación orgánica y natural mientras crece el el verde, para asemejarse a una colina de rocas. Esto es un intento de suplementar la arquitectura tradicional con las metodologías y conceptos modernos, para crear en este lugar la amplificación de un espacio como nunca se había visto. La presencia y gravedad de la cubierta de pizarra es algo visible en todo el mundo, sin embargo puede, de forma simultánea salir volando con una brisa. El conjunto de pizarra levita como una tela ondulante.” Junya Ishigami

Constructivamente el pabellón se compone de un principio sencillo: estructura ligera de acero creando una malla de soporte sobre la cual se dispone una subestructura que soporta la cubierta. El diseño digital permitió ajustar más el análisis a escala del modelo, y así valorar nuevas iteraciones estructurales. Este proceso fue fruto de una estrecha colaboración con la constructora e ingeniería. La estructura de acero se aspecto sencillo, consigue mostrar esa simplicidad a través de un nudo estructural en el cual la unión entre el soporte y la subestructura de cubierta se realiza mediante la terminación en cabeza de alfiler. Los perfiles tienen una sección de 50mm y alturas variables, éstas se unen entre sí mediante 106 nodos cruciformes, cada uno con diferente orientación, ángulo y carga. La unión es completamente limpia y sólo se marca la distinción entre soporte y subestructura de cubierta a través del color y la materialidad: mientras que los soportes se pintan de blanco, la subestructura de cubierta se deja en acero visto, de forma que ésta se mimetiza con la cara inferior del material de cobertura difuminada por la sombra.

Imagen del proceso de construcción

La estabilidad de una estructura tan ligera como esta, se consigue a través del refuerzo en las tres esquinas del pabellón mediante el arriostramiento en ambas direcciones en cubierta. Por otra parte, la cimentación que sostiene a los 106 pilares, está formada por una losa de hormigón armado pulido en su cara superior, el peso total del acero es de 16 toneladas, por lo que la relación de peso entre cimentación y estructura la dota de gran estabilidad. La losa de cimentación tiene un espesor que es el doble de lo habitual. Para asegurar la conexión entre la losa de hormigón y los soportes, los perfiles se hincan en la losa sin el uso de la tradicional placa base. En lugar de eso los soportes presentan una espiga en la parte inferior que se abre en la losa repartiendo las cargas de forma más eficiente.

Imágenes del proceso constructivo. ©Stage One

El material de cobertura e imagen representativa del proyecto es la pizarra, pizarra de Cumbria cortada en losas que suman un peso total de 61 toneladas. La colocación de las pizarras de forma cuidadosa permite que la superficie en conjunto sea resistente al agua, al tiempo que generan una textura superficial muy representativa. La fijación de las losas al resto de la estructura se hace mediante una malla soportada por la subestructura de cubierta. La malla está compuesta por cable de 8mm.

Aunque el pabellón es un espacio de circulación libre, incorpora dos salidas, una en la fachada sur y otra en la oeste. Debido a la configuración del pabellón, es accesible para todas las personas, ya que no incorpora desniveles de ningún tipo. Además la máxima distancia entre salidas es de 19m.

Desde el punto de vista técnico, el pabellón se describe casi como una topografía pétrea artificial, una superficie que se levanta del suelo a través de soportes ligeros. El pabellón permanecerá abierto durante el verano de 2019.