El arquitecto indonesio Artha Krisiantara ha merecido el Primer Premio del Concurso Internacional Kaira Looro en el que el tema a resolver era una escuela rural en el África subsahariana.
El Concurso Internacional Kaira Looro, promovido por la organización humanitaria Balouo Salo, destaca por proponer temas de gran impacto social para ser resueltos por jóvenes arquitectos con el incentivo de que el proyecto ganador podrá llevar a cabo la construcción de la arquitectura propuesta.
Además, el dinero recaudado por las tasas de participación se dona para cubrir actividades de ayuda que desarrolla la organización Balouo Salo principalmente en una región del sur de Senegal en la que trabaja desde 2014 y en donde ha llevado a cabo trabajos de infraestructura para llevar el agua potable a las aldeas y en donde se están construyendo los proyectos de anteriores ediciones del concurso Internacional Kaira Looro: La Casa de las Mujeres y La Casa de los niños.
El objetivo de esta edición no era sólo constructivo sino que tenía un fin más ambicioso al querer descubrir entre los proyectos participantes un nuevo modelo que proporcionara las claves de un sistema educativo adecuado para los países en desarrollo. Y así lo han entendido muchos de los participantes que han desarrollado propuestas alejadas de los modelos escolares tradicionales.
La escuela en el área rural del África subsahariana debe servir para proteger y desarrollar uno de los objetivos de la Agenda para el Desarrollo Sostenible, el derecho a la educación, pero también ofrecer un espacio seguro para el desarrollo de los niños y niñas, desde el punto de vista, físico y sicológico.
En las bases del concurso se pedía plantear la construcción de un edificio situado en un área rural del sur de Senegal, que ocupara un máximo de 560 metros cuadrados, en el que se utilizaran métodos de auto construcción por la comunidad, con materiales y tecnologías compatibles con los recursos del entorno.
El Jurado que en 2023 ha evaluado los proyectos presentados ha estado formado por: Kengo Kuma (Kengo Kuma & Associates), Agostino Ghirardelli (SBGA | Blengini Ghirardelli), Benedetta Tagliabue (EMBT Miralles Tagliabue), Mphethi Morojele (MMA Design Studio), Manuel Aires Mateus (Aires Mateus Architects), Raul Pantaleo (TAM Associati), Mphethi Morojele (MMA Design Studio), Emmanuelle Moureaux (Emmanuelle Moureaux Architecture + Design), Saad El Kabbaj, Driss Kettani y Mohamed Amine Siana, así como un comité científico compuesto por Raoul Vecchio (Balouo Salo), Sebastiano D’Urso (Università di Catania), Dario Distefano (Archicart), Mulaye Diebate (Balouo Salo) junto con expertos de arquitectura sostenible y acciones humanitarias.
El jurado seleccionó entre los 955 proyectos recibidos, 50 propuestas ganadoras y entregó un Primer Premio, un Segundo Premio, un Tercer Premio, dos Menciones honoríficas, 5 Menciones especiales, 20 finalistas y 20 Top 50.
Lista de los 10 primeros proyectos ganadores del Concurso Internacional Kaira Looro 2023.
Extracto de la memoria de proyecto: “El viaje comienza en la entrada, que proporciona una experiencia diferente a cada persona que la atraviesa, dependiendo de las proporciones de su cuerpo. Quienes necesiten comida pueden dirigirse a la cantina que se ha preparado con provisiones de alimentos. Y los que necesiten libros como material de estudio pueden tomarlos directamente prestados de la biblioteca que se ha dispuesto con antelación.
El trayecto hasta el aula a través de pasillos, que antes estaban vacíos, se transforma en formas indefinidas, de grande a pequeño o de pequeño a grande, creando diferentes atmósferas frente a las aulas. Este pasillo se transforma en un ecosistema en el que los niños no están clasificados por edades, en un espacio abierto y cómodo, con mobiliario ajustable, que crea una atmósfera que invita a debatir, compartir y socializar entre alumnos, profesores y la comunidad circundante.
Nada más entrar en el aula, un ambiente cálido pero relajado les recibe desde las paredes hechas de tierra y el aire fresco circula primero a través de las plantas situadas delante de la clase y luego entra por las ventanas y los huecos de los muros hasta que finalmente sube hacia arriba liberando el calor del aire por una rendija del techo.
Durante los recreos, hay un espacio al aire libre donde los niños pueden relajarse bajo el árbol y relacionarse o conocer el ecosistema que les rodea. Este espacio al aire libre también tiene un campo que puede utilizarse para hacer ejercicio.
Después del horario escolar, los niños pueden volver a casa, pero también pueden regresar en cualquier momento para disfrutar de las instalaciones fuera del aula, que siempre están abiertas a cualquiera, incluso a quienes no asisten allí a la escuela.
En esta escuela, el objetivo a alcanzar es crear un entorno que no sólo proporcione educación, sino también apoyo emocional, calidez y libertad para explorar el propio potencial. Con este diseño, las escuelas se convertirán en lugares donde se sacie el hambre antes de empezar a aprender y los niños puedan sentirse seguros, respetados e inspirados para afrontar los retos de su vida, adquirir conocimientos y establecer relaciones sociales de apoyo mutuo.
Extracto la memoria del proyecto: El concepto de esta escuela gira en torno a la idea de apertura y comunidad. La escuela está diseñada como un bloque unido y cohesionado, que simboliza la unidad de la comunidad.
Su envoltura exterior se abre y se extiende, permitiendo que el edificio escolar sea accesible a sus alumnos y a la comunidad. A pesar de esta apertura, el edificio permanece interconectado a través de sus esquinas, como recordatorio de la importancia de la conexión de la comunidad.
El diseño arquitectónico de la escuela incluye un tejado inclinado que cumple una doble función. En primer lugar, canaliza eficazmente el agua de lluvia hacia los túneles de drenaje situados en la parte exterior del recinto escolar, contribuyendo a la creación de un depósito vital de agua. Además, el tejado inclinado ayuda a la ventilación natural al permitir que el aire caliente suba y salga a través de las amplias paredes de bambú. Esta técnica de refrigeración pasiva contribuye a mantener un entorno de aprendizaje cómodo y bien ventilado.
Además, para optimizar la iluminación natural, el corrugado exterior sellado está estratégicamente situado en los lados este y oeste, protegiendo de la intensa luz solar, mientras que el uso de paredes de bambú en los lados norte y sur permite la penetración de abundante luz natural. La densidad del bambú varía en función de la privacidad o apertura necesarias y de las condiciones climáticas, garantizando un confort térmico y unas condiciones de iluminación óptimos en las aulas.
Extracto de la memoria del proyecto: Nuestra escuela primaria es una propuesta sencilla, elegante y racional. La organización del espacio se establece a través de 3 entidades diferenciadas. Un suelo y una cubierta que definen un gran espacio exterior circular y acogedor en el que un muro compartimenta los espacios del programa.
El suelo y la cubierta delimitan un volumen concebido como soporte de las diferentes actividades. Por su geometría, protegen del clima y ofrecen gradas y una plataforma para descansar o expresarse. Un sólido muro de tierra compactada serpentea en el interior de este volumen sin llegar a cerrarlo del todo y permite además la ventilación natural al dejar entrar el aire fresco por un lado y salir el caliente por el otro. Delimita y orienta los espacios, en función de las necesidades de intimidad vinculadas al programa. Este muro dibuja en su totalidad un patio interior recreativo para los niños. Interrumpiéndose, marca la entrada a la escuela y hace el patio accesible a todo el pueblo para otras actividades. Por último, un último tabique, más ligero, delimita los espacios del programa al tiempo que permite modular la apertura al exterior en función de las necesidades.
A lo largo de esta pared, el programa se divide en dos grandes entidades: Espacios comunitarios como la sala polivalente de la entrada y, en continuidad, espacios más específicos de la escuela. El punto de unión entre los dos niveles programáticos lo constituye la cantina, que se utiliza tanto para la escuela como para las actividades del pueblo. Por último, la elección de situar los espacios a un lado u otro del muro está pensada para permitir el uso simultáneo entre las actividades de la comunidad y la enseñanza sin perturbar el confort.
Un segundo objetivo del Concurso Internacional Kaira Looro es dar la oportunidad a jóvenes arquitectos del mundo de acercarse a la práctica profesional, primero enfrentándose a un proyecto con autoría propia, segundo, con la posibilidad de construir ese proyecto y tercero realizando prácticas en un estudio de arquitectura reconocido.
El primer premio del concurso, además de recibir 5.000 € tendrá acceso a un tiempo de práctica en el estudio del arquitecto Kengo Kuma en Tokio.
El segundo premio recibe 2.000 € y tendrá acceso a un tiempo de práctica en el estudio Miralles Tragliabue –EMBT– dirigido por la arquitecta Benedetta Tagliabue desde Barcelona.
El tercer premio recibirá 1.000 € y placa y tendrá acceso a un tiempo de práctica en el estudio Blengini Ghirardelli – SBGA– en Milán.
Todos los proyecto ganadores pueden conocerse a través de la página web del Concurso, así como a través de la publicación oficial, cuyos beneficios se destinará objetivos humanitarios.
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Publicado: Jul 14, 2023