El Jardín Botánico de Coimbra cumple 250 años; patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 2013, el arquitecto João Mendes Ribeiro ganó en 2016 el concurso para la rehabilitación de sus espacios que desarrolló con la sensibilidad que caracteriza su arquitectura.
Croquis de João Mendes Ribeiro de la conexión del Jardín Botánico con los edificios universitarios de la Alta Coimbra. ©JOAO MENDES RIBEIRO
El Invernadero Tropical, Estufas Tropicais, y el nuevo Espaço Ciência in Situ están situados en Alta de Coímbra, la zona más elevada y antigua de la ciudad. Pertenecen al Jardín Botánico de la Universidad, construido en 1772 por el Marqués de Pombal. Las Estufas Tropicais, terminadas en 1859, son uno de los primeros ejemplos de arquitectura de hierro en Portugal, siendo su referencia los invernaderos de Kew Gardens en Inglaterra.
Fotografía © José Campos.
Fotografía © José Campos.
Plano de situación. Ver PDF.
Alzados y secciones. Ver PFD.
Axonometría de la intervención de João Mendes Ribeiro. Ver PDF.
La intervención en los invernaderos supuso la restauración y recuperación de las estructuras existentes y la implantación de soluciones técnicas adecuadas para el crecimiento de las plantas y para el uso del espacio, concretamente para recibir visitas. Estas condiciones implicaron nuevos medios de sombreado y ventilación, para garantizar los niveles higrométricos y de humedad adecuados y el acceso al edificio y dentro de él.
Una de las medidas de mayor impacto en la rehabilitación de los invernaderos fue la recuperación de la relación interior/exterior original y la restitución de la transparencia de los vidrios en las superficies verticales y en la cubierta, eliminando el encalado que había añadido opacidad y peso a las superficies vidriadas. Para sustituir el anterior sistema de control de la temperatura y la luz conseguido mediante el encalado, se aplicó un nuevo vidrio laminado transparente, con capa interior de control solar. Esta medida sirve para corregir la deficiente regulación térmica, la protección solar y la seguridad del espacio, provocando una alteración radical de la imagen de los invernaderos, que ahora presentan una configuración distinta según las estaciones.
Fotografía © José Campos.
Los tres cuerpos del invernadero trabajen con condiciones diferenciadas de calor y humedad, para lo cual se contaba con los sistemas automatizados de control solar, y se recurrió a un sistema de calefacción que utilizase parte de la masa resultante de la poda de árboles del jardín, optando por una caldera alimentada por combustible orgánico.
Fotografía © José Campos.
El cambio de las antiguas placas de vidrio, unas 5.000, por otras nuevas de vidrio laminado con capa de control solar, fue posible gracias a la revisión de toda la estructura de hierro del invernadero, que hubo que decapar, metalizar así como comprobar y sustituir cuando era necesario todos los elementos de unión, los diferentes perfiles, incluyendo canaletas, tirantes para confirmar su capacidad para absorber las nuevas cargas y todas las prestaciones previstas en el proyecto.
El espacio central corresponde a un momento singular de la visita a los invernaderos, dado su altísimo techo y la existencia de una galería a lo largo del nivel superior. Para reforzar su carácter excepcional, se eliminaron los parterres y se sustituyeron por un gran estanque en el que se cultiva la Victoria amazónica, una especie de nenúfar gigante procedente de la cuenca del río Amazonas. El estanque está revestido de placas de acero pintadas de negro para resaltar la superficie de espejo del agua.
Fotografía © José Campos.
El nenúfar Victoria Regia, nombrado así por la reina británica, es la especie más conocida del jardín botánico. Mendes Ribeiro reorganizó el espacio en torno a él, desmontando el el pequeño invernadero situado al oeste y trasladando el nenúfar a la zona central del invernadero principal. En este espacio ha sustituido los antiguos parterres por un estanque a ras del suelo cuyo interior forra con una chapa de acero negro que materializa el plano del agua. Para observar mejor el nenúfar gigante se ha realizado un balcón perimetral al que se sube por una escalera de caracol, ambos metálicos.
Fotografía © José Campos.
Sección por el estanque de la Victoria amazónica. Ver PDF.
Leyenda: 1. Planos inclinados con acristalamiento complanar. 2. Limpieza y restauración de la mampostería original. 3. Mantenimiento de la estructura metálica existente, restauración y pintura blanca mate. 4. Dispositivo de sombreado mecánico y automático. Lona blanca translúcida enrollable con sistema de cables de acero desde el interior. 5. Marcos de ventanas existentes a mantener, recuperar y pintar en blanco. 6. Escalera con peldaños (sin espejo) en chapa de acero de 5 mm de espesor y eje de tubo de acero de 9 cm, todo ello a pintar en blanco. 7. Barandilla de la galería y escalera de acceso en chapa de acero a pintar en blanco, sección 45 x 5 mm, puntales en diam. 14 mm 8 mesa continua en chapa de acero, esp. 5mm, con patas de varilla de acero redonda diam. 14mm, para pintar en blanco. 9. Pavimento de la galería con estructura tubular de 90 x 90 x 4,5mm y cubierta de chapa de acero diam. 5mm, para pintar en blanco. 10. Pilar de galería estructural de tubo de acero diam. 9 cm, a pintar en blanco. 11. Lámpara de chapa de Álvaro Siza e-27 en aluminio. 12. Depósito con revestimiento de chapa de acero a pintar en negro. 13. Pavimento en losas de piedra caliza Ataija aserrada en color crema. 14. Trabajos de cantería originales a limpiar y restaurar. 15. Losa de superficie cóncava en piedra caliza Ataija aserrada para el cierre del canalón.
Al igual que el nuevo estanque Victoria, el Espaço Ciência in Situ se construyó desde cero junto a los invernaderos para acoger las infraestructuras sanitarias públicas y un nuevo programa. Remontándose a las tradicionales casas de recreo, este edificio tiene una cubierta ajardinada con una estructura de madera y piedra y persianas de listones de madera.
Fotografía © José Campos.
El espacio que antes ocupaba el invernadero pequeño se ha convertido ahora en una zona de estar que conecta el edificio principal con un cuerpo adyacente, llamado servicio de Ciencia in situ, que aloja las instalaciones sanitarias públicas y zonas de trabajo.
Fotografía © José Campos.
El edificio Ciencia in situ es de nueva planta, con estructura de piedra caliza y madera de pino de Riga envejecida, sutilmente reforzada por discretas vigas de acero, y cubierta ajardinada.
Fotografía © José Campos.
Fotografía © José Campos.
Fotografía © José Campos.
Mendes Ribeiro también ha diseñado dos pequeños invernaderos para cactus y especies de plantas suculentas, situados en una plataforma al norte que se complementan con dos artilugios cónicos que recogen el agua de lluvia y un depósito enterrado que puede utilizarse para regar las plantas.
Arquitecto: João Mendes Ribeiro
Cliente: Universidad de Coimbra, Portugal. Concurso 1er Premio.
Equipo: Ana Cerqueira, Catarina Fortuna (coordinación del proyecto). Filipe Catarino (coordinación de la construcción). Ana Maria Feijão, Inês Lourenço, Joana Brandão, Joana Figueiredo, Nuno Alves Pereira, Sofia Rangel.
Constructor: Tecnorém - Engenharia e Construções, S.A.
Estructuras: Afonso Serra Neves, Jorge Augusto de Jesus Martins, Vitor Silva
Instalaciones hidráulicas: Rossana Pereira (GEPECTROFA)
Instalaciones eléctricas: Alexandre Ferreira Martins (GPIC)
Instalaciones mecánicas: Raul Bessa, Miguel Alves (GET)
Seguridad: Alexandre Ferreira Martins (GPIC)
Fecha: 2016
Fotografía: José Campos - fotografía de arquitectura
Bibliografía: "Estufa Grande do Jardim Botanico de Coimbra: urna joya de hierro y cristal". Artículo publicado en la revista metálica, nº 52, diciembre 2018. Ver PDF.
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Publicado: Jul 11, 2022