Espacio flexible y transformable IWI de Juan Ruiz y Amelia Tapia

Los arquitectos Juan Ruiz y Amelia Tapia han desarrollado un mueble que al desplegarse crea un espacio protegido que han titulado de acuerdo la imagen de acordeón que suscita: IWI.

Ruiz y Tapia reconocen su pasión por los mecanismos y por la arquitectura transformable que les ha inspirado, como ha sido las estructuras compactas y plegables de Emilio Perez Piñero, las propuestas para una arquitectura nómada de Archigram, las estructuras inflables de Prada Poole (Casa Jonas) o los más actuales espacios transformables desarrollados por PKMN arquitectos en "All I Own house".

Izquierda, prototipo teatro ambulante desplegable de Emilio Perez Piñero; derecha, el cúbiculo inflable hecho a medida de Mike Webb and David Greene (Archigram).

 Izquierda, Casa Jonás de José Miguel de Prada Poole y, derecha, "All I Own house" de PKMN Arquitectos.

IWI es un artefacto que ofrece al usuario un espacio habitable que se adapta a su estilo de vida, construido en madera mediante producción digital de corte por control numérico (CNC milling), creando un producto industrializado que permite su universalidad, producción en serie y fácil montaje y desmontaje.

Diagrama extensión. Ver pdf.

Módulo explotado. Ver pdf.

Construcción de IWI

IWI consta de dos módulos autoportantes de madera conectados por un sistema plegable tipo acordeón. El módulo posterior contiene las instalaciones eléctricas y de agua, además del mobiliario y elementos necesarios para cumplir con la función del habitáculo. Este módulo también contiene el piso que se despliega del mueble a través de un sistema de bisagras. Mediante unos soportes y niveladores, este se apoya y se adapta a las irregularidades del terreno.

Axonometría constructiva. Ver pdf.

El módulo frontal permite el ingreso al habitáculo además del despliegue del sistema de acordeón, una estructura conformada por cruces, rieles, ruedas y cubierto por un textil.

Planos IWI. Ver pdf.

Sección constructiva. Ver pdf.

El espacio se transforma de un mueble compacto a un espacio habitable, a través del desplazamiento del módulo frontal (mediante ruedas) conectado al sistema de acordeón. Una vez que este módulo se desplaza, se despliega el textil que será el envolvente del habitáculo. El ingreso se hace a través de la puerta de vidrio del módulo frontal.

Uso de IWI. Ver pdf. 

Cuando los dos módulos de madera se encuentran pegados uno al otro y el sistema de acordeón se encuentra totalmente plegado, el artefacto cumple la función de estantería, ocupando las dimensiones mínimas de 1 metro por 2,40 metros. Cuando el módulo frontal se desplaza 2,40 metros en el eje longitudinal, el sistema de acordeón se despliega totalmente y el habitáculo adopta su máxima dimensión, de 3,45 metros de largo. 

Proceso de producción. Ver pdf.

La tecnología digital utilizada para la fabricación de este producto (corte por control numérico o tecnología CNC) permite su industrialización y replicabilidad en masa con precisión milimétrica en cualquier parte del mundo, como también su fácil ensamblaje y desmontaje.

Material del módulo IWI

El material utilizado para la estructura de los módulos es contrachapado de eucalipto, ensamblado mediante uniones en seco tipo puzzle. Todas las piezas son tratadas contra la humedad o rozamiento, dependiendo de lo que está en contacto con su superficie.

Los dos módulos se encuentran impermeabilizados por una capa continua de corcho natural que sella toda la envolvente. Sobre esta capa de impermeabilizante se apoya una fachada ventilada de listones de madera de ciprés, que ayudan a proteger a la lámina de corcho del sol.

El sistema plegable tipo acordeón consta de una estructura de pórticos de madera de ciprés conectados por un sistema de aspas de aluminio y ruedas que permiten su fácil deslizamiento. Todo este sistema está cubierto por un textil técnico impermeable y resistente al sol. Toda la estructura se comporta como una cercha, siendo resistente a sismos, granizo y viento.

El suelo, construido con el mismo sistema de paneles de madera, se encuentra plegado y anclado al módulo posterior. Este piso autoportante se pliega o despliega en dos partes, mediante un sistema de bisagras y una vez desplegado, se apoya sobre el terreno a través de soportes o patas niveladoras. El entramado estructural del suelo se encuentra elevado y aislado con lana de oveja.

Diagrama flexibilidad de usos.

El módulo frontal es fabricado igualmente con paneles de madera y con la misma geometría que el módulo posterior, con dimensiones de 3 metros de alto, 2,40 metros de ancho y 0,45 metros de profundidad. Al deslizar este módulo, la estructura de acordeón se extiende, conformando el espacio habitable. El ingreso se hace a través de la puerta de vidrio, de doble hoja, que permite abrir totalmente el espacio hacia el exterior. 

Creación del espacio IWI

El espacio se extiende o comprime, según las necesidades del usuario. Al comprimirse, se comporta como un mueble o estantería. Al extenderse se convierte en un espacio habitable que contiene todo lo necesario para cumplir con sus diferentes funciones, como oficina/despacho de trabajo, estudio de yoga, espacio de relax, taller, sala de reuniones, cuarto de huéspedes, etc. Permite la flexibilidad de uso tanto en su interior, como el aprovechamiento del espacio exterior (al comprimirlo), mostrándose respetuoso con el entorno.

Fotografía: JAG Studio.

Fotografía: JAG Studio.

El módulo posterior, está constituido por un ̈mueble ̈ con todo lo necesario para el uso del espacio, sillas, mesas,

cajones, estanterías, etc. Además, contiene todas las instalaciones que cada uso determine, como lavabo, iluminación, toma corrientes, interruptores eléctricos, etc. IWI permite su uso “On grid” u “off grid”, dependiendo del lugar donde se sitúe. El módulo frontal es el ingreso al espacio y se desliza sobre ruedas, desplegando la estructura tipo “acordeón”, que es recubierta con un textil.

Fotografía: JAG Studio.

Fotografía: JAG Studio.

Fotografía: JAG Studio.

El primer prototipo IWI se ha construido en Quito, Ecuador, sobre la azotea de un edificio situado en el norte de la cuidad, orientándose al oeste, con vistas a la ladera del volcán Pichincha. Su uso específico es de estudio o lugar de trabajo para dos personas.

Fotografía: Joel Heim.

El área de construcción es de 8,5 m2 extendida y 2,4 m2, comprimida. El módulo posterior, contiene dos mesas y dos sillas, espacio para impresora, cajones, estantería y además un espacio de cafetería con lavabo oculto. También incluye las instalaciones eléctricas y de agua, listas para conectarse a la red existente.

Esquema del mueble.

Fotografía: JAG Studio.

El espacio de la terraza no se pierde, se transforma, dando espacio exterior o espacio interior según la actividad que se realice. El habitáculo se puede extender completamente, teniendo un espacio para 2-4 personas. Se puede extender a la mitad, dejando espacio exterior para realizar cualquier otra actividad al aire libre, o se puede cerrar completamente y usar todo el espacio exterior.

Fotografía: JAG Studio.

Fotografía: JAG Studio.

Los arquitectos Juan Ruiz y Amelia Tapia se han formado de manera específica en la construcción con madera. Amelia Tapia, tras finalizar sus estudios en la Universidad Católica de Quito, realizó un Msc en Building Technology en la Universidad Técnica de Delft en los Países Bajos, país en el que, posteriormente, trabaja en Cabin Anna y se especializa en las nuevas técnicas de construcción en madera; Juan Ruiz es arquitecto por la IE Universidad de Segovia y Msc en Eficiencia Energética y Arquitectura Bioclimática por la Universidad Camilo José Cela de Madrid y tras una estancia en Ecuador, se especializa en arquitectura industrializada en madera, trabajando en los Países Bajos en el equipo The New Makers. Actualmente desarrolla su actividad laboral con Amelia Tapia, además de ser director de proyectos en la oficina TEC Taller EC en Ecuador.

Juan Ruiz y Amelia Tapia han diseñado, desarrollado y patentado IWI, cuya fabricación tarda dos semanas y el montaje dura dos días.

Fotografías: JAG Studio