Diálogos en Tectónica: Covid-19 y las oficinas con Carlos Arroyo y Fermín Vázquez de b720

En el tercer diálogo organizado con el fin de ofrecer una reflexión sobre cómo puede afectar la experiencia y consecuencias de la pandemia del Covid-19 en la forma de concebir los proyectos de arquitectura, ha estado centrado en las oficinas y los espacios de trabajo, lugares que han permanecido vacíos estos meses, imagen insólita que nunca hubiéramos imaginado.

El bullicio de los centros de las ciudades en las horas punta, el movimiento de tráfico hacia las zonas industriales, el movimiento incesante en las torres de oficinas o en cada despacho han cesado y se ha trasladado la actividad al espacio doméstico. Para intentar imaginar las

consecuencias de este gigantesco experimento universal, como le ha denominado José María Marzo, director de Tectónica y moderador del diálogo, hemos invitado a dos arquitectos con experiencia en los proyectos de espacios de trabajo en diferentes escalas: Fermín Vázquez del estudio b720 y Carlos Arroyo.

El vídeo del diálogo se comparte al final del artículo

Se ha perdido el miedo a la tecnología 

La sensación general que nos han transmitido ambos arquitectos es la de un optimismo por la oportunidad que supone esta crisis. El edificio de oficinas, el espacio de trabajo común, no va a desaparecer por la necesidad humana de relacionarnos, de establecer contacto visual y personal con compañeros, clientes, proveedores… Fermín Vázquez ve este momento como una oportunidad para mejorar nuestros medios de trabajo y los entornos, que sin lugar a dudas van a cambiar porque, como comentó Carlos Arroyo, la constatación de las posibilidades reales del trabajo a distancia, que se ha adoptado con naturalidad hasta por los profesionales de más edad, que son quienes en muchas empresas toman las decisiones, va suponer que traslados a reuniones remotas que antes parecían imprescindibles, ahora no tengan sentido alguno. Se ha perdido el miedo a la tecnología

El edificio de oficinas ha sido la tipología protagonista de la arquitectura del siglo XX. Ha definido nuestras ciudades ¿cómo se va a adaptar a las nuevas exigencias higiénicas que impone la pandemia si una de sus características era la densidad de ocupación, el espacio abierto…? Ante esta realidad ambos arquitectos son conscientes que hay un tiempo de transición hasta que se encuentre la protección definitiva frente a la enfermedad en el que habrá que recurrir a soluciones temporales de protección y en las que veremos los espacios divididos por mamparas, con exigencias de limpieza extrema, pero lo importante es pensar en una transformación para mejorar de los espacios de trabajo, presionar la normativa para que se valore los espacios abiertos, exteriores, y Fermín Vázquez señalaba la importancia de las zonas de relación, incluso dotar de nuevo de importancia a las escaleras que en tantos edificios de oficinas son difíciles de encontrar.

La flexibilidad se impone

Carlos Arroyo, en cuyo estudio ya llevan tiempo desarrollando proyectos de espacios de trabajo en los que no hay jerarquías y se adaptan a la variedad de ocupantes diversos, ve que es una tendencia que facilita la adaptación a la situación actual y futura en las que la flexibilidad es el valor predominante. Ya no hay puestos de trabajo fijos, hay opciones para desarrollar diferentes tipos de trabajo: mesas con puntos de conexión, áreas de estar para reuniones o realizar trabajos que sean más reflexivos, espacios de reunión… que se puedan adaptar a demandas muy diferentes en constante cambio.

Carlos Arroyo, Ayuntamiento de Oostkamp, Bélgica. En este proyecto de 2012 el cliente ya planteó una demanda de espacios flexibles de uso indefinido para adaptarse a las necesidades cotidianas, pero también a las necesidades extraordinarias. Fotografía Miguel de Guzmán.

Considera también que las nuevas herramientas de trabajo ofrecen unas posibilidades perfectas para esta situación en las que las compañías van a necesitar seguir trabajando a distancia, no sólo a través de videollamadas sino de trabajo real en común a distancia y habla de una propuesta que están desarrollando en la que pone en valor las posibilidades de ocupar el medio rural utilizando todas las herramientas laborales disponibles: digitalrural.eu

Defensa de la sostenibilidad

Fermín Vázquez , a lo largo del diálogo, expresa su temor de que esta pandemia pueda ser una excusa para deshacer muchos de los avances logrados en términos de sostenibilidad, que vuelva a priorizarse el coche privado o a aceptar como incuestionable el uso masivo de plásticos. Así como cree que sí se deben incorporar hábitos que son comunes en oriente, como es el del uso de mascarilla ante incluso una pequeña infección para proteger al ‘otro’, automatismos para evitar tocar superficies en las que es difícil mantener la higiene como son las áreas de los servicios, confía que ello no implique un mayor aislamiento, sino espacios más generosos en los que se pueda seguir manteniendo una relación estrecha de trabajo. Y señala como un reto actual para el arquitecto el de cómo hacer que, tanto la empresa como los trabajadores que en ella desarrollan su actividad, se sientan representados en estos espacios flexibles y sin una definición tan categórica como los anteriores edificios de oficinas. En la arquitectura moderna, a pesar de la estandarización de las soluciones constructivas de los edificios de oficinas siempre se intentaba ir un paso más allá para diferenciar el edifico corporativo, ahora hay que encontrar la manera de lograr esa identificación en un entorno flexible y dinámico. Comenta que en un edificio que han terminado recientemente en el centro de Madrid, de proporciones muy amplias, interesaba especialmente cómo se percibía desde fuera, hacia y para la ciudad.

b720 Fermín Vázquez – Arquitectos. Edificio Rios Rosas, Madrid 2019. En la rehabilitación de un edificio de los años setenta que ocupaba un área muy considerable, un aspecto que preocupaba especialmente era su representación, su relación con la ciudad, que se diseñó abierta y amable a través de una fachada resuelta con un muro cortina de perfiles de madera.

Como una evolución deseable, Fermín Vázquez imagina edificios de uso mixto, de menor escala que los desarrollados hasta ahora, que ofrezcan espacios de trabajo flexibles, en donde relacionarse, al que se pueda llegar andado o en bicicleta desde el domicilio. Al tiempo que la necesidad de desarrollar trabajo en la propia casa debería suponer la exigencia de unas viviendas mejor resueltas, porque, de nuevo, existe el peligro de que el trabajo acabe invadiendo la intimidad sin ofrecer nada a cambio, y es algo contra lo que hay que luchar.

Normativas que responden a las demandas

Proponer cambios en la normativa para que se adapte a las nuevas necesidades es un punto en el que ambos arquitectos están de acuerdo, y que también surge en las preguntas con las que finaliza el diálogo. Las normas, los certificados son importantes y responde a demandas, necesidades y en definitiva al bien común. Carlos Arroyo destaca como ahora los promotores de edificios de oficinas presentan como un valor el cuidado en la calidad del aire, porque así lo exige la normativa y obtiene un certificado, pero también porque hay una demanda, seguramente resultado del llamado ‘edificio enfermo’. Esta es una exigencia que con la experiencia de la pandemia se intensificará y se regulará más. Recuerda que de las medidas higienistas de finales del siglo XIX y principios del XX surgió una arquitectura blanca en la que la luz reflejara, de grandes ventanales, y aquellos edificios que respondían a una lucha por curar la tuberculosis con el paso del tiempo se convirtieron en cánones de belleza y estilo, por lo que supone que de las medidas con criterio higienistas actuales surgirán soluciones que con el tiempo nos parecerán bellas, pero que todavía no se sabe cuáles serán.

Imagen de la película Playtime de Jacques Tati, 1967. Hasta que no exista una vacuna o efectiva para el Covid-19, habrá un tiempo en el que se deberán tomar mayores medidas de protección, pero no se vislumbra una vuelta a las oficinas cubículo que con ironía plasmó Jacques Tati en su película.



Tectónica organiza desde 2017 unos encuentros entre arquitectos en el espacio Finsa21 en Madrid. El tema que centraba los encuentros en el curso 2019-2020 era el de 'Contextos'. Ante la imposibilidad de mantener el calendario previsto, se han transformado estos encuentros en diálogos online, en los que se trata de dedicar una espacio para la reflexión sobre cómo afectará el Covid-19 a la arquitectura.

Ha moderado el diálogo José María Marzo Díez, director de Tectónica.

El texto es un extracto de las principales ideas desarrolladas en el diálogo organizadas por temas. Redacción: Berta Blasco Góngora.